La clasificación es el arte de registrar o catalogar a los organismos. Existen maneras diferentes para hacerlo, por ejemplo, pueden ser catalogados en el orden en que fueron descubiertos, por tamaño o por grupos, sin embargo estas clasificaciones no nos dicen nada acerca de las cualidades del organismo individual. Por ello fue necesario la creación de un sistema, esto nos lleva a Carolus von Linne o Linneo, un hombre que se inclinó por la identificación del grado de semejanza entre los diferentes organismos. Después de un cuidadoso estudio, estaba claro para él que ciertos organismos compartían características en común. Esta información fue utilizada para agrupar a estos organismos en conjuntos o grupos relacionados. Para entender este concepto, tomemos por ejemplo un gran grupo de animales que poseen esqueleto óseo. Esta característica en particular sólo se encuentra en los peces, anfibios, reptiles, mamíferos y aves, un grupo que ha sido clasificado como los “vertebrados”. De la misma manera, encontramos que los anfibios, los reptiles, los mamíferos y las aves tienen cuatro extremidades y se agrupan como “tetrápodos”. Los peces no son tetrápodos debido a que tienen aletas en lugar de extremidades. Si seguimos analizando, vemos que los reptiles, los mamíferos y las aves se desarrollan dentro de una membrana de huevo, mientras que los anfibios no lo hacen. Cuando Charles Darwin publicó su teoría de la evolución por selección natural en 1858-1859, causó gran polémica entre las personas con creencias religiosas, ya que implicaba que los organismos no habían sido colocados en la Tierra en un acto divino de la creación, sino que la vida había cambiado gradualmente o evolucionado durante un inmenso período de tiempo, mediante un mecanismo llamado “selección natural”.
Su teoría de la selección natural se basa en una serie de factores. En primer lugar, todos los organismos en una especie tienden a variar. No hay dos seres humanos que sean idénticos, a excepción de los gemelos idénticos por supuesto. Con esta variación dentro de las especies, es posible que bajo ciertas condiciones ambientales algunos individuos estén mejor adaptados, lo que les permite sobrevivir mejor que los otros. A medida que pasan miles o incluso millones de años, los organismos transfieren estos rasgos favorables a su descendencia, pudiendo exhibir un cambio en su naturaleza, es decir, evolucionar. Esto se debe a que los organismos que sobreviven suelen ser aquellos que poseen los rasgos más favorables.
Por ejemplo, cuando nos fijamos en las bacterias que se reproducen a un ritmo rápido, nos encontramos con que algunas han evolucionado y se han vuelto resistentes a los antibióticos. De la misma manera las cucarachas desarrollan una resistencia a los insecticidas. Si nos fijamos en estos pequeños cambios que han tenido lugar en un corto período de tiempo, para comparar con los millones de años que han transcurrido desde el origen de la vida, entonces la posibilidad de cambios radicales en las características de los organismos parece muy razonable.
Los dinosaurios se dividen en dos grupos principales, los Saurisquios y los Ornitisquios, que incluyen sus propios subgrupos. Los ornitisquios incluyen una serie de dinosaurios comedores de plantas como los estegosaurios, anquilosauriano, los dinosaurios con cuernos, cresta y picos de pato. Los dinosaurios ornitisquios aparecen en los tres grandes períodos de la historia del dinosaurio. Por su parte, los saurisquios comprenden a los terópodos carnívoros y a los sauropodomorfos que comen plantas. Ellos se desarrollaron en el período Jurásico y terminaron en el período Cretácico.
- El dinosaurio más antiguo conocido perteneciente a este grupo data de 228 millones de años atrás, el pequeño Pisanosaurus, cuyo fósil fue encontrado en Argentina. Debido a que el Pisanosaurus caminaba sobre dos patas y se alimentaba con plantas, se puede asumir que sus antepasados también fueron bípedos herbívoros.
- El grupo de los dinosaurios ¨blindados¨ incluye a los estegosaurios y ankylosaurios. Tienen una característica distintiva y es que sus cuerpos poseen escudos y placas cubriendo la mayor parte de toda la superficie ósea. Aparecieron desde el Jurásico medio hasta finales del Cretácico.
- Los dinosaurios con cresta y cuernos (marginocephalians) poseían un escudo óseo que se elevaba desde el cráneo. Uno de los dinosaurios más conocidos de este grupo son los Triceratops, que tenían tres cuernos.
- Los ornitópodos tenían una dentadura especial que les permitían masticar la materia vegetal. Aparecieron en el período Jurásico y continuaron hasta el final del Cretáceo. Este grupo también incluye a los dinosaurios pico de pato que florecieron durante el último período cretáceo.
Tipos de suarisquios
- El grupo de los sauropodomorfos incluye a los pequeños prosaurópodos y los saurópodos gigantes de cuello largo, el animal terrestre más grande de todos los tiempos. Estos dinosaurios se remontan al período Triásico y ya en el Jurásico evolucionaron en subgrupos. El Plateosaurus es un dinosaurio muy conocido de este grupo.
- Los terópodos se dividen en varios subgrupos, entre los que se destacan los ceratosaurios y los tetanuros. Los grandes dinosaurios de este grupo son el Spinosaurus de Egipto, el Baryonyx de Inglaterra y Níger, el Allosaurus del Jurásico superior en América del Norte, el Carcharodontosaurus y el Giganotosaurus, del Cretácico superior en África y América del Sur. Se incluyen otros como el Oviraptor, que fue un dinosaurio en forma de ave y el Velociraptor, que fue un cazador.
La evolución de los dinosaurios en aves
Los dinosaurios, desde sus inicios como bípedos pequeños y herbívoros, transitaron por muchos cambios evolutivos importantes, que incluyen el desarrollo de las plumas. Surgidos como animales de sangre fría, las plumas les ayudaron a transformarse en criaturas de sangre caliente y volar, finalmente evolucionando en aves.